Excursionismo, Recorrido del vehículo
La caminata nos llevará a orillas del mar de Galilea, al mundo natural del Agamon Hula y a la magnífica vista del monte Keren Naftali, que asciende 500 metros por encima del valle.
La ruta: Ein Nun
Acceso: conduzca 5 km desde Tiberias al norte, a lo largo del mar de Galilea (ruta 90), nos llevará a la entrada del asentamiento de Migdal y, en la entrada de este, hay una carretera de tierra marcada “Sendero de Israel”. Vaya por el sendero aproximadamente medio kilómetro y, al final, está la piscina de Ein Nun; la carretera gira a la derecha y llega al aparcamiento del manantial. El Ein Nun, que proviene de la antigua colonia de Migdal, es una sorpresa agradable. La Autoridad de Alcantarillado del Kinneret rehabilitó el lugar y lo transformó en un lugar verdaderamente encantador. Ein Nun es un manantial fértil. La nota más visible es la gran piscina cuadrada, cuyos lados están hechos de piedras de basalto. Desde la piscina sale un canal que saca el agua a lo largo del torrente pequeño del río Nachal Nun. Un corto paseo pasa por el lado del torrente. Después de unos 200 metros, junto a un bulevar hermoso, el camino cruza el torrente y vuelve por el otro lado a la piscina cuadrada. Esta sección también pertenece al “Sendero de Israel”. La piscina cuadrada y los canales se construyeron en la década de 1920, después de que se vendieran las granjas de Migdal a particulares. El gran eucalipto se plantó en aquellos días. A su sombra hay una mesa para picnic. El manantial tiene un historial más largo. Parece ser que los residentes de Migdal, durante el periodo romano (s. I-III d.C.), situada a orillas del mar de Galilea, a 1,5 km de distancia, ya usaban el agua del manantial para regar sus campos. La piscina redonda, construida junto a la fuente del manantial, aún existe. La piscina, de 30 metros de diámetro, está ligeramente oculta por la vegetación de las orillas que la rodean. Se construyó para subir el nivel del agua en el manantial, para que el agua del manantial pudiera llevarse a los campos del acueducto, cuyos restos todavía son visibles en el lado del torrente. El nombre Ein Nun se refiere al nombre arameo de una torre – la torre Nunya, que significa la torre del pescado.
El estuario del Jordán y el sendero alrededor del mar de Galilea
Acceso: desde Migdal, volveremos a la ruta 90 y continuaremos al norte. En el cruce de Kfar Nahum, gire a la derecha, a la carretera que lleva al puente Arik y a Katzrin (carretera 87). Desde la entrada al Parque Nacional de Kfar Nahum, conduzca 4 km y a la derecha, antes del puente Arik, gire a la derecha y aparque a la sombra del bosque de eucaliptos. El río Jordán está a unos 50 metros de distancia. El bosque de eucaliptos es una de las entradas al “sendero Kinneret”. Este sendero está marcado con las marcas de sendero morado. La idea era andar alrededor del mar de Galilea por un camino a pie, que creó la Sociedad para la Protección de la Naturaleza de Israel en 2003. El desarrollo del sendero lo hizo la Autoridad de Alcantarillado de Kinneret y la Asociación de la Ciudad de Kinneret. El propósito del camino es devolver al público el derecho a viajar libremente por las orillas del mar de Galilea y familiarizarse con la naturaleza, el paisaje, los lugares históricos y los valores que representa el lago. Cuando se haya completado, el sendero englobará todo el mar de Galilea, alrededor de unos 60 kilómetros. Hasta ahora se han marcado 45 km. Este lugar se llama el estuario del Jordán al mar de Galilea, pero tenemos que reconocer que esta definición es bastante esquiva. El estuario del Jordán al mar de Galilea cambia el lugar según el nivel del agua del lago. En los últimos años, el mar de Galilea ha tenido un nivel bajo y el estuario del Jordán se ha ido “alejando” de aquí. La zona expuesta está cubierta de tamarindos. Cuando el mar de Galilea está lleno, el estuario del Jordán está muy cerca de aquí. Vale la pena andar un poco más por el sendero del Kinneret. En el extremo sur del bosque hay una barrera verde y más allá está el camino. Un paseo de pocos minutos a través de un palmeral desértico lleva a una escalera que sube a la derecha. Las escaleras suben hasta donde se ve una vista hermosa de la gran piscina, que recibe el agua del Ein Yatzur. Alrededor de la piscina crece una maraña de vegetación. En invierno haya aves acuáticas y, en verano, hay polluelos de pequeñas garzas y pájaros cantores en los matorrales. Los eucaliptos que crecen cerca de la piscina son utilizados como aojamiento por los grandes cormoranes.
Agamon Hula
Acceso: al final del mirador, volveremos al vehículo por el mismo camino que vinimos. Vuelva al cruce de Kfar Nahum y conduzca al norte por la ruta 90 hacia Kiryat Shemona. La entrada al valle de Hula se encuentra 4 km al norte de la entrada a la Reserva Natural de Hula, entre los kilómetros 457-458. El centro de visitantes se encuentra cerca del aparcamiento.
Historia: en 1934, Yehoshua Hankin compró la concesión para secar el valle de Hula. En el gran valle, había 8000 acres de pantanos y un gran lago, que tenía un área de 3500 acres. El principal suministro de agua de los pantanos y del gran lago era el río Jordán. Con el establecimiento del estado de Israel, el gobierno de Israel impuso sobre la KKL el secar los pantanos y el lago y el río Jordán se dividió en dos canales: el lago y los pantanos desaparecieron, el secarlo añadió decenas de miles de acres de cultivo agrícola, pero, por otro lado, causó un daño medioambiental. El lago y los humedales del valle de Hula, antes de secarlos, servían de cuenca de sedimentación natural frente al río Jordán y sus afluentes. Después de secarlo, compuestos de nitrógeno y fósforo fluyeron al mar de Galilea, que se usaba para fertilizar los campos del valle. El haber secado el Hula también afectó a la maravillosa flora y fauna del valle. El valle de Hula era el lugar de descanso más importante de aves migratorias de Europa a África y vuelta, incluidos pelícanos, patos y garzas. En 1993, volvieron a llamar a la KKL y un año después, el canal original del río Jordán fue restaurado y una zona de 250 acres se llenó de agua en el corazón del valle, cuyo primer propósito era contribuir a la calidad del mar de Galilea, pero también al nuevo lago conocido como Agamon Hula, que llevó a que se alcanzasen nuevos niveles en lo que respecta a la conservación de la naturaleza y el turismo. El Agamon está rodeado por una carretera asfaltada de unos 8,5 km de longitud, la carretera es llana y cómoda, y pasa entre el lago, los canales de agua y las arboledas con aparcamientos. Puede disfrutar de la observación de aves en el observatorio, que se encuentra en el lago y permite ver muchas clases de aves. En 2010, se inauguró “el Observatorio de aves acuáticas” – un punto de observación flotante en medio del lago, que ofrece una vista de lo que ocurre en el lago desde la perspectiva de las aves acuáticas. El Agamon tiene también un jardín botánico que reconstruye el hábitat del pantano. El jardín, que cubre 8 acres, tiene plantas acuáticas que eran comunes en su tiempo en los pantanos del Hula. Entre las plantas está el nenúfar amarillo, plantas flotantes, un tipo de iris, la azucena de agua, la prímula acuática y brotes de crasas. Los visitantes pueden identificar las especies de plantas por las indicaciones en el jardín. Durante los meses de agosto y septiembre, el Jardín botánico recibe una visita importante, la magnífica mariposa colias naranja. Para que la larva se desarrolle adecuadamente, la colias necesita una planta nítrica puntiaguda que crece en el valle de Hula. Las mariposas se quedan en la reserva hasta octubre. Cuando el aire se enfría, las mariposas desaparecen.
Cómo visitar el Agamon Hula
La vista debería durar unas 3-4 horas. Para preservar la naturaleza en el valle de Hula y, con el fin de no perjudicar el disfrute de otros visitantes, no se permite la entrada de vehículos privados a la zona del parque (excepto a los que tienen una etiqueta de minusválido). El aparcamiento en el estacionamiento y pasear alrededor del Agamon y sus lugares es gratis, excepto el pago de los 3 NIS por persona para el proyecto de las grullas. Los que van con sus propias bicicletas pueden montar en bici, sin coste, solo los días laborables (los fines de semana y festivos no se permite entrar al sitio a las bicicletas privadas). Se pueden alquilar bicicletas de distintos tipos (individuales, para parejas y familias), carritos de golf y un carro. También hay un buffet en el centro de visitantes.
Horas de apertura:laborables de 9:00 a 1 hora antes de que se ponga el sol. Fines de semana y festivos de 6:30 a 1 hora antes de que se ponga el sol.
Tel. 04-6817137
Aparcamiento HaElot en el valle de Kadesh
Acceso: desde Agamon Hula conduzca hacia el norte por la ruta 90 aproximadamente 1,5 km y gire a la izquierda (oeste) en la intersección de Ko'ah. Ahí, suba por la ruta 899 a la cadena montañosa de Naftali. Pase el cruce de Yesha y la fortaleza de Yesha y entre en el valle de Kadesh, que está cultivado en su totalidad con viñedos y árboles frutales. Unos 100 metros después de girar hacia Yiftach, encontrará el aparcamiento a la izquierda y el aparcamiento de HaElot junto a él. El aparcamiento se encuentra bajo la sombra de un pistachero gigante. Es uno de los árboles más impresionantes de Israel. Su enorme tronco, de casi cinco metros de ancho, tiene unas grandes ramas y la KKL-JNF ha montado un sistema de apoyo para las ramas para que no se venzan por su propio peso. La sombra que da este árbol es lo suficientemente grande para que 100 personas se acojan bajo su protección. La KKL también le ha hecho otro favor a este árbol y ha drenado la tierra de debajo, lo que ayuda a que se ventile el sistema de las raíces.
La cima del monte Naftali
Acceso: conduzca desde el aparcamiento de HaElot de vuelta hacia el este, al cruce de Yesha, y gire al sur por la ruta 886. A aproximadamente 1,8 km al sur de la entrada al Moshav Ramot Naftali, gire al este (izquierda) a un camino de tierra, marcado en verde. Un viaje corto de 1,7 km le llevará a su base, que es uno de los puntos de observación más hermosos de Israel. Hemos reservado las horas antes de la puesta de sol para observar desde el monte Naftali. Esta vista es espectacular: el valle de Hula y el Agamon Hula que hemos visitado más temprano, extendidos como la palma de su mano. El Golán y el Hermón complementan la imagen maravillosa y el sol, que ahora está a nuestra espalda, ilumina y resalta cada aspecto. Un gran lugar para acabar un día de excursión.