Arqueología e historia
El pueblo druso de Isfiya está situado en lo alto del monte Carmelo dominando una vista panorámica de las verdes colinas circundantes. El pueblo tiene una rica tradición de apertura, hospitalidad y cordialidad, que son características de la comunidad drusa. Su ubicación especial y la riqueza de la tradición étnica y la cultura han demostrado atraer especialmente a viajeros y turistas.
Isfiya se fundó durante los siglos XVII y XVIII por drusos de las montañas del Líbano. Posteriormente, se les unieron varias familias egipcias y, en 2003, el pueblo se fusionó con la localidad drusa vecina de Daliyat el-Carmel. Los dos pueblos unificados reciben actualmente el nombre de Ciudad Carmel (Ir Carmel).
El pueblo se ha abierto a los turistas, conservando al mismo tiempo el estilo de vida tradicional druso. Los drusos son conocidos por su hospitalidad cordial y reciben a los invitados sonriendo con entusiasmo. Los habitantes de Isfiya no son ninguna excepción y reciben a los visitantes en sus hogares, donde pueden vislumbrar de primera mano las costumbres religiosas y tradiciones de los drusos.
Los visitantes pueden pasear por las estrechas calles del pueblo y deambular por los pintorescos callejones por su cuenta, pero se recomienda ir con un guía, que contribuirá a su visita enseñándole el lugar y contándole interesantes historias acerca de la comunidad. En el centro del pueblo hay varios edificios antiguos construidos con el estilo característico del norte de Israel y el sur del Líbano. También hay una prensa de aceite en el impresionante barrio antiguo, donde los visitantes pueden informarse acerca del proceso de elaborar aceite de oliva y fabricar velas de aceite.